El piolet que penetró el cráneo de Trotski se exhibirá en público tras décadas oculto

El arma del asesinato todavía lleva manchas oxidadas de sangre del enemigo de Stalin.

El piolet que sirvió de arma para el asesinato del revolucionario bolchevique León Trotski será exhibido en público por primera vez en 78 años, cuando se una a la colección del Museo Internacional de Espías en Washington el próximo año, informa 'The Guardian'.

Esta herramienta de alpinista entró en el cráneo del famoso adversario de Iósif Stalin en la localidad de Coyoacán— actualmente parte de la Ciudad de México— el 20 de agosto de 1940, gracias a un agente secreto soviético, el comunista español Ramón Mercader.

El estadounidense Keith Melton, cofundador del Museo Internacional de Espías, contó que llevaba 40 años buscando el instrumento que acabó con Trotski, comprobando cada rumor sobre el arma, hasta emergió Ana Alicia.

El coleccionista no reveló cuánto pagó a la mujer. Ahora el piolet, que lleva huellas oxidadas de los dedos ensangrentados de Mercader, es parte de una colección de casi 5.000 piezas que constituirá el fondo del museo.

Un plan ideal

El asesinato del famoso revolucionario fue una de las más conocidas operaciones de la NKVD —predecesora de la KGB— en el extranjero. Ramón Mercader, un joven comunista español que se enroló en la NKVD con la ayuda de su madre, una agente del servicio secreto soviético, llegó a México en 1939 bajo la identidad falsa de Frank Jackson, un rico comerciante canadiense.

Intimó con una de las secretarias privadas de Trotski, Sylvia Agelof, y así logró acceder al círculo de confianza del famoso comunista exiliado. Pronto Mercader comenzó a conquistar la confianza de Trotski, quién le tomo por un verdadero adepto a sus ideas.

En la mañana del 20 de agosto de 1940, Mercader fue recibido a solas por el dirigente comunista y decidió aprovechar este momento para cumplir su tarea. Cuando Trotski se acercó a la ventana volviendo la espalda a Mercader, este le propinó un feroz golpe de piolet en la cabeza, entrando la herramienta siete centímetros en el cráneo de Trotski.

Mercader fue inmediatamente detenido y luego condenado por asesinato a 20 años de prisión. Tras el fracaso de una operación para liberarle en 1943, tuvo que cumplir la condena completa y salió en libertad en 1960.

El 6 de mayo del mismo año se trasladó a la URSS, donde fue condecorado en secreto como Héroe de la Unión Soviética.

Mercader pasó sus últimos años viviendo entre Moscú y La Habana, donde murió de cáncer en 1978. Está enterrado en el cementerio moscovita de Kúntsevo bajo el nombre falso de Ramón Ivánovich López, cerca de la tumba de otro famoso agente soviético: Kim Philby.

FUENTE: Russia Today en Español