«Casualidad Elegante»

Nosotros somos el reflejo de algo que siempre estuvo ahí, esa casualidad elegante y llena de luz que llamamos destino, pero que se percibe y se siente como una serendipia. Somos ese momento que siempre tuvo que suceder, ese beso que siempre tuvo que sentirse y siempre se ahogo en medio de mil suspiros.
Nosotros somos dos almas que se dieron a la fuga y se buscaron constantemente en cada sueño con ilusión y deseo. Somos dos manos que se han sentido desnudas y frías, hasta ese preciso roce entre ellas. Somos esa melodía y letra que siempre fue una hermosa canción, somos poesía y musa, somos esa alegría que lleva el viento entre sonidos y melancolía.
Nosotros sólo somos el reflejo de algo que siempre estuvo ahí, esa casualidad elegante, de ese destino inminente; nosotros somos amor, ese que siempre fue, es y siempre será.